El fiscal general de Chiapas, Jorge Luis Llaven Abarca, no sólo hostiga a mujeres indefensas: también a periodistas críticos contra el gobierno corrupto de Rutilio Escandón Cadenas.
Este fin de semana unos uniformados de la @FGEChiapas estuvieron intimidando a Horacio Culebro Borrayas y su hijo, Enrique Culebro, al parecer intentaban "sembrar pruebas" en su unidad vehicular, para posteriormente proceder en su contra.
Oportunamente fueron descubiertos y grabados, por lo que no pudieron cumplir con su cometido, pero, aún así, uno de los policías intentó quitarle el teléfono celular a Enrique Culebro, para borrar las evidencias de su actuación, sin lograr su objetivo. Si les avergüenza que los exhiban cometiendo ilícitos, tan fácil es que no los cometan.
"Acá el tema es el hostigamiento, persecución e intimidación, a petición del Fiscal; primero, esos sicarios uniformados no pueden entrar al parqueo de la plaza a supuestamente verificar carros robados, menos sin orden de la autoridad competente y tampoco exigirte no grabar, pero esto no es casualidad, en mi domicilio todos los días hay una Mitsubishi Outlander blanca con 4 SICARIOS vigilando.... Ya lo he denunciado pública y penalmente", informó el abogado y periodista chiapaneco, Horacio Culebro Borrayas.
¿Qué pretende el Fiscal General de Chiapas y máximo líder del PVEM chiapaneco?
Acallar a la prensa crítica. Intimidar a quien le dice sus verdades. Ablandarlos. Amedrentarlos. Censurarlos. No sería necesario pretender silenciar a la prensa libre si el fiscal hiciera bien su trabajo, si procuraran la justicia apegándose a la ley y a lo que es justo, pero no lo hacen de esa manera, pues han convertido a la dependencia en la fuente de financiamiento de procesos electorales y para enriquecerse a manos llenas.
Justo como dice Culebro Borrayas, Llaven Abarca ha convertido a Chiapas en la tierra de las injusticias donde las voces libres se callan con sangre, cárcel y muerte. De otro modo no tendríamos reporteros asesinados ni compañeros encarcelados.
¿Necesitan los policías husmear dentro de una unidad vehicular para saber si un coche es robado? ¿Es necesario introducirse a la unidad? ¿No tienen otras maneras de averiguarlo?
"Los uniformados estaban viendo hacia adentro de mi carro. Los empecé a grabar y por ello el que conducía la Nissan blanca trató de arrebatarme mis teléfonos exigiendo que dejara de grabarlos", señala, a su vez, Enrique Culebro.
Cometen un delito y para no dejar evidencias cometen uno más, el de robo con violencia, aunque en este caso se quedó en mera tentativa, pero porque los periodistas no se dejaron.
Estamos muy mal en Chiapas con una institución que no combate a la delincuencia y las injusticias sino todo lo contrario: las cometen y se convierten en delincuentes.
Fsur
Disraelí E Ángel Cifuentes