23 de noviembre de 2020.
Policías estatales de Veracruz allanaron el domicilio de Lizeth Ramos Rodríguez, en el municipio de Carlos A. Carrillo, donde golpearon y torturaron a su familia, dejando en estado de gravedad a una persona y con severas lesiones a los demás. Como si en el país no existiera un estado de derecho.
Y todo porque Lizeth Ramos se negó a las exigencias sexuales de José Carlos Contreras Marmolejo, funcionario de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz. Uno más de los que llegan al poder público con sueños de semental para todo el personal femenino bajo su cargo.
En un video que circula en redes sociales, la víctima relata, con lágrimas mojándole el rostro, los detalles de esa agresión en contra de su familia y los motivos que sus agresores tuvieron para hacerlo, responsabilizando de todo a José Carlos Contreras Marmolejo y el Delegado Cabrera, de Carlos A. Carrillo.
Contreras Marmolejo ya había amenazado a la denunciante con represalias de este tipo cuando ella se negó a sostener relaciones sexuales con dicho funcionario, de forma rotunda.
“¿Qué es lo que les hace sentir a los hombres que tienen derecho sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas con la facilidad con la que toman un objeto? ¿Quiénes creen que son para arrebatar sueños ajenos por propios de placer? ¿Qué clase de personas son para pensar que somos objetos sin vida, sin posibilidad de sentir, de soñar, de pensar, de decidir, ni voz para que se haga valer cuando decimos NO?”, se pregunta la víctima en el post de ese video.
Todo comenzó cuando la víctima de hostigamiento sexual y de allanamiento acudiera a la Delegación de la Secretaría de Seguridad Pública, ubicada en Carlos A. Carrillo, donde el funcionario pretendía condicionar la contratación de la joven a un “acostón”.
“Serás mía por las buenas o por las malas”, fue la respuesta del funcionario a la negativa de la chica, quien comenzó a recibir hostigamientos y amenazas a través de mensajes en su celular, de las que aporta diversas capturas de pantalla.
Finalmente el día nueve de octubre de las amenazas pasaron a los hechos y ese día, a las dos de la madrugada, tres personas entraron a su domicilio donde golpearon y torturaron a su familia, entre ellos a su padre, a quien dejaron inconsciente y con lesiones graves.
Ante ello, Lizeth Ramos Rodríguez solicitó el apoyo del Secretario de Seguridad Pública, Hugo Gutiérrez Maldonado, del gobernador Cuitláhuac García Jimémez y del presidente de la república, para que se haga justicia.
“Hago responsable a Contreras Marmolejo y al Delegado Cabrera de lo que pueda pasarme a mí y a mi familia, porque José Carlos es la única persona que ha expresado su intención de asesinarme y de terminar con mi familia si me continúo negando a sus exigencias y porque el Delegado se está comportando como su cómplice”, concluyó.
Disraelí E. Ángel Cifuentes.
EnfoqueF.
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