Pensando en proteger su robadera, el presidente municipal de Las Margaritas, Jorge Luis Escandón Hernández, está ocupando su tiempo los recursos oficiales en heredar el cargo a dos políticos para que ganen la siguiente elección del 2021 y de esa manera el saqueo de los recursos financieros de la próxima administración siga quedando en familia.
Su primer gallo es su compadre Zaragoza Argüello, actual Tesorero, a quien poco le importa la ley pues utiliza su cargo público para hacer campaña, convertido desde hace dos años en el principal proveedor del ayuntamiento; es decir, él mismo se contrata y él mismo se paga como responsable del manejo de todo el dinero municipal. Súper negocio.
El segundo gallo es su cuñado, Felipe Ruiz Moreno, llamado "chapulín" porque se caracteriza de cambiar de partido según sus intereses, pues ya fue del partido verde, del PRD y ahora quiere ser del PT, donde quiere utilizar a ese partido para ser candidato a presidente y colocar a su esposa como candidata a diputada, aunque para ello tendrá que ponerse a lidiar con Marcos Rojas, quien maneja sus estructuras.
Ahora Felipe Ruiz Moreno se muestra desesperado por que le cumpla su cuñado, Jorge Luis Escandón, de ser candidato, ya que no encuentra partido y su ambición por ser de nuevo presidente lo mata, teniendo como opción probable el Partido del Trabajo.
Cabe recordar que Ruiz Moreno fue presidente municipal en el 2010 y se caracterizó por no atender a la gente, pues todo el tiempo se la pasaba en su rancho y en cabalgatas, e hizo una fortuna con los contratistas que hasta caballos de carreras y de cabalgata le regalaban. Toda la gente sabe como empezó el cuñadito, pues antes ni burritos tenía.
El pacto político del alcalde perredista con sus 2 gallos es que una vez que sea presidente cualquiera de los dos le encubra su cuenta pública y así evitar terminar en el Amate.
Todos los margaritenses deberán abrir bien los ojos en las siguiente elección para que no se permita que lleguen a la presidencia estos dos políticos elegidos por Escandón Hernández para proteger sus latrocinios.
Disraeli E. Angel Cifuentes
FSUR