Lo agarraron, lo encerraron, lo hicieron caminar en el puro lodo, pero ofreció una camioneta a quienes lo retuvieron como garantía de regresar a su municipio. Ni por la silla volvió.
Allá sigue la camioneta, y el dinero que prometió ir a traer a Tuxtla, a México y Nueva York no aparece por ningún lado. Ni el dinero ni él ni nada. Ni por la silla volvió.
Ahora los campesinos de El Progreso, hartos de tantas mentiras de su presidente, están comenzando a detener a los habitantes de la cabecera municipal, pues los funcionarios de Octavio Hugo Morales Santizo también decidieron encerrarse. Aprendieron de su alcalde: cuando el pueblo los van a buscar se suben a su tapanco.
De ese modo la medida tomada es vigilar cuando pasen los familiares, compadres o vecinos de su presidente, a ver si así vuelve por su camioneta y cumple el Profe Tavo.
A quien detuvieron este viernes fue al Comisariado Ejidal de Bella Vista, Edilio López, sin deberla ni temerla.
¿Dónde está el profe Tavo? ¿Dónde se metió el presidente municipal de Bella Vista, Octavio Hugo Morales Santizo? De plano: Ni por la silla volvió.
Disraeli E. Angel Cifuentes
FSUR
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